Hacia agosto de 1979, cuando llegué a Panamá terminados los estudios de especialización, era yo el décimo ortodoncista en el país. En ese entonces, el nivel de intercambio profesional entre los ortodoncistas del medio era muy escaso, con muchos escollos nacidos de celos profesionales y diferencias personales.
En el mes de octubre de ese año recibimos una invitación de parte del Dr. Raúl Orillac para asisitir a una conferencia dictada por un ortodoncista americano que venía de visita, a llevarse a cabo en el Club Unión. Llegada la fecha, asistimos a esa reunión los doctores Raúl Orillac, Jorge Arango, Juan R. Morales Jr., Hernán Ramos, Carlos Morales, Luis Batres, Pablo Rojas Pardini y el suscrito.
Durante el aparte social que tuvimos con razón de esa conferencia surgió la idea que estas reuniones debían llevarse a cabo de manera más regular, y configurar así un grupo de estudio para intercambiar experiencias profesionales y de mutuo beneficio, tomando yo entonces por decisión de todos los colegas la responsabilidad de coordinar dicho grupo de estudio.
Transcurridos varios meses de funcionamiento como grupo de estudio, surge en el primer trimestre de 1980 la idea de formalizar este esfuerzo convirtiendo el grupo en una sociedad de especialistas, de las cuales no existía ninguna en el medio odontológico, y procurar el logro de una personería jurídica que le diera vida legal a este esfuerzo.
Esta iniciativa dio origen a diferencias de opiniones, y a la separación de algunos miembros de este grupo de estudio.
Los que quedábamos en el grupo decidimos echar adelante la idea, formalizando una primera directiva que recayó en el Dr. Luis Batres como Secretario; Dr. Pablo Rojas Pardini como Tesorero y mi persona como Presidente. Hacia el mes de Octubre de 1980, y luego de someter a consideración de las autoridades del Ministerio de Gobierno y Justicia de ese entonces los Estatutos originales, se logra conseguir la personería jurídica de la Sociedad Panameña de Ortodoncistas, primera sociedad de especialistas legalmente constituida en las ramas médicas en la República de Panamá.
Uno de los primeros actos realizados por la Sociedad fue la de una entrega simbólica al entonces Presidente de la Asociación Odontológica Panameña, Dr. Germán Tortosa, de la personería jurídica
como acto de lealtad para con el gremio madre, y en evidencia que nuestra iniciativa no llevaba intención alguna de debilitar a la AOP.
De hecho, la AOP en aquellos tiempos pasaba por momentos difíciles en cuanto a membresía y finanzas, y durante 1982 el único medio de enlace de los miembros de la AOP era el boletín mensual de la Sociedad Panameña de Ortodoncistas.
La Sociedad Panameña de Ortodoncistas actuaba con mucha pujanza, dando pasos claros en pro de la especialidad, y así desarrolló la propuesta inicial del reconocimiento de las especialidades odontológicas a nivel del Consejo Técnico de Salud. Esta iniciativa de reconocimiento estuvo estancada hasta que en 1983 toma posesión como Presidente de la AOP el Dr. Luis Batres e impulsa la aprobación del Reglamento de Especialidades Odontológicas que rige, con modificaciones, todavía en nuestro país.