Los retenedores son aparatos diseñados cuidadosamente por tu ortodoncista para retener o hacer movimientos menores en tus dientes, estos deben ser utilizados de acuerdo a las instrucciones de tu ortodoncista y lo debes llevarlo a cada una de tus citas de control.
Debes utilizar tus retenedores todo el tiempo hasta cuando estés durmiendo, solo deberas retirarlos de tu boca al comer y al cepillar tus dientes. Cuando utilizas este tipo de retenedor removible tendrás un trastorno del lenguaje pero a los pocos días ya no estarás hablando extraño, evita estar jugando con el aparato porque puedes desajustarlo y esto podría causar problema a tus dientes .
Al colocar el retenedor por primera vez o al ajustarlos puede sentir molestias en tus dientes por unos días , especialmente después de cada ajuste, pero si tu retenedor te causa heridas o molestias en el paladar puedes acudir a la clínica para un ajuste.
Debes limpiar tu retenedor con cepillo de diente y enjuague bucal o también puedes utilizar unas pastillas especiales para limpiarlos.
Si estas utilizando retenedores fijos deberás cepillar tus dientes perfectamente, de ocurrir desprendimiento o rotura deberás acudir a la clínica para ajustarlo o reemplazarlo.
Una de las mayores causas de perdida de los retenedores removibles es envolver tus retenedores en servilleta cuando te lo quitas para comer, tu u otra persona lo podrían botar sin querer, tampoco puedes colocarlos sin estuche en tus pantalones, estos podrían romperse o perderse.
El mejor estuche para tu retenedor es tu boca, si no está en tu boca deberá estar en su estuche plástico.
Si se te cae o se ensucia, no debes colocarlo en agua caliente ya que esto lo dañará y habrá que confeccionar uno nuevo.